No hubo sorpresa en cuanto a la asistencia de anoche al Estadio Cibao: Más de 15 mil fanáticos se dieron cita para presenciar el juego entre Tigres y Águilas; los dos equipos más ganadores de la pelota dominicana.
Al final del partido, el público santiaguense salió complacido, ya que vieron a su conjunto regresar al primer lugar, en el aniversario número 55 del llamado “Valle de la Muerte”.
Ante la mayor asistencia registrada en la joven temporada local, el abridor Ángel Castro transitó durante seis episodios sin permitir carreras y su respaldo ofensivo lo obtuvo desde la misma primera entrada para que las Águilas Cibaeñas derrotaran en un emocionante partido 4-1 a los Tigres del Licey, desplazándolos del primer lugar.
Con la obtención del triunfo, las cuyayas (5-1) volvieron a ocupar la primera posición y detuvieron una cadena de cinco victorias de los felinos, que perdieron por segunda ocasión en siete encuentros y quedaron en el segundo puesto con 5-2.
Castro (2-0) permitió tres hits, ponchó a cuatro y no dio boletos, para anotarse su segundo triunfo. El cubano Yunieski Maya (0-1) cargó con el revés tras ceder cuatro anotaciones en cinco episodios. T.J. Peña laboró durante una entrada y un tercio en blanco, para anotarse su primer rescate del año. Antes habían desfilado por el montículo cibaeño; Wilkins Arias (0), Juan Sandoval (1.0 y 1CL), Edward Paredes (0) y Peña (1.2).
Defensa
La defensa mamey también jugó un importante papel al realizar dos doble matanzas; La primera vía 6-4-3, en el cuarto capítulo y otra en el octavo, cuando el antesalista Jermaine Curtis inició una doble eliminación en batazo de Yamaico Navarro que pudo significar que culminó con los Tigres amenazaron con descontar el marcador en el octavo episodio.
Los aguiluchos conectaron 12 imparables. Ocho de sus nueve jugadores iniciales conectaron al menos un hit. De regreso a la alineaciˆn abridora, el importado Dan Black, encabezó el ataque mamey al batear de 4-3, con un doble y dos impulsadas.
Pitcheo clave
La ventaja de los aguiluchos se redujo a tres, cuando el jardinero azul, Domingo Santana despachó cuadrangular solitario frente a Juan Sandoval, abriendo el octavo acto, donde los Tigres amenazaron al colocar dos hombres en circulación sin outs; Fue cuando T.J. Peña obligó a Yamaico Navarro a batear para doble play y luego ponchó al poderoso Juan Francisco, sofocando la rebelión felina.
Público en juego
El momento de mayor ovación en el estadio fueron cuando Ángel Castro recibió hits sucesivos sin outs en la parte alta del sexto y ante la amenaza de que se empatara el juego, pudo retirar en fila los próximos tres bateadores, el último de ellos Yamaico Navarro.