Danilo Medina se reunió ayer con el expresidente Leonel Fernández, con quien conversó sobre la sentencia 168-13 del Tribunal Constitucional y el anteproyecto de ley de naturalización especial.“He comenzado a hacer consultas acerca de la ley que vamos a mandar al Congreso, acerca de la sentencia 168-13”, fue la lacónica respuesta del mandatario al término de la reunión con el presidente del oficialista Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
El encuentro, que se llevó a cabo en la Fundación Global Democracia y Desarrollo (Funglode), se prolongó por casi una hora y forma parte de una serie de consultas que por toda esta semana estará realizando el jefe de Estado, según informó él mismo al asistir en la tarde a un evento en el hotel Crowne Plaza.
La semana pasada el Presidente también se reunió, en dos ocasiones, para los mismos fines con el consultor jurídico del Poder Ejecutivo, César Pina Toribio, el presidente del Consejo Nacional de Migración y ministro de Interior y Policía, José Ramón Fadul, así como con el presidente de la Junta Central Electoral (JCE), Roberto Rosario.
Según trascendió, el mandatario tiene programado reunirse hoy con el también expresidente de la República por el Partido Revolucionario Dominicano (PRD), Hipólito Mejía.
El Poder Ejecutivo tiene pendiente enviar al Congreso Nacional la legislación “especial” para beneficio de personas de descendencia haitiana que “no están contempladas en el Plan de Regularización de Extranjeros”, que ordena ejecutar la controversial sentencia 168-13 sobre derecho a la nacionalidad.
De acuerdo con Fadul, el anteproyecto, prometido a los haitianos por las autoridades dominicanas en el marco de la primera ronda de diálogo binacional, está en manos del mandatario y de él depende que sea llevado al próximo encuentro con Haití.
“Maduran” acuerdos para la próxima reunión
La tercera reunión para diálogo de la Comisión Bilateral de Alto Nivel entre República Dominicana y Haití, que estaba programada para el pasado jueves 20 de este mes de marzo, fue pospuesta para el día ocho de abril, “para dar tiempo a madurar los acuerdos que se están preparando” en las diferentes materias que componen la agenda del encuentro entre ambos países.