Ginebra.- La Organización Mundial de la Salud (OMS) señaló hoy que casi 130 trabajadores sanitarios han muerto hasta ahora como consecuencia del ébola, entre los más de 225 que han resultado infectados.
Mediante un comunicado remitido hoy, el organismo ofreció estos datos al confirmar que, por primera vez, alguien que trabajaba bajo su protección había contraído el peligroso virus.
Se trata de un epidemiólogo senegalés enviado por encargo de la OMS a trabajar a Sierra Leona en la contención del brote de ébola y que, actualmente, está siendo tratado allí, con la posibilidad de ser evacuado si es necesario.
El especialista senegalés trabaja para una institución que forma parte de una red creada para que la OMS pueda dar respuesta rápida a brotes potencialmente epidémicos en cualquier país, gracias al despliegue de personal con distintas especialidades.
Desde que empezó el actual brote de ébola, el pasado marzo, la OMS ha enviado a tres países afectados -Liberia y Guinea Conakry, además de Sierra Leona- 400 trabajadores sanitarios tanto de la organización como de esa red.
Actualmente, cuenta con unos 200 empleados en esos países, de los cuales una treintena pertenecen a la referida red, confirmó Tarik Jasarevic, portavoz de la organización.
La OMS recordó que el personal sanitario es una parte muy importante de la respuesta al brote de ébola, pero también reconoció el riesgo que implica.
Por esa razón, aseguró que toma todas las preocupaciones con los sanitarios que envía a las zonas donde circula el virus, de modo que puedan protegerse a sí mismos y que una vez allí cuenten con consejo y apoyo médico.
Durante los últimos meses, numerosos médicos, enfermeras y personas que cumplen otras funciones de atención a enfermos de ébola han resultado contagiados, lo que se atribuye a que los sistemas de salud de los países afectados son muy frágiles y mal dotados.
La falta de equipamiento básico, incluidos aquellos para la protección personal, salarios impagos y desconocimiento de la manera cómo tratar a los enfermos han provocado -entre otras causas- el contagio de muchos sanitarios, principalmente en Liberia.
Este país ha tratado a dos médicos y una enfermera infectados con un tratamiento experimental contra el ébola, bajo la consideración de que son personas que se han puesto en riesgo para ayudar a otros.
Sin embargo esas terapias son extremadamente escasas y la que fue administrada a esos trabajadores médicos, al igual que a dos cooperantes estadounidenses que se curaron y a un religioso español que murió está agotada.
El balance de muertos por ébola es actualmente de 1.427 personas, de 2.615 infectados.
Sin embargo, la propia OMS ha reconocido que esta estadística no refleja la realidad y subestima el alcance del brote, por lo que está intentando, asesorada por especialistas en el terreno, obtener cifras más ajustadas a lo que realmente ocurre. EFE