El Instituto Nacional de Defensa a los Derechos del Consumidor (Pro Consumidor) salió al frente a acusaciones de las industrias embutidoras y cárnicas y afirmó que en los análisis a los salamis se cumplieron las normas internacionales aplicadas para los controles de calidad.
En una declaración pública, el organismo estatal señala que "la evaluación de calidad e inocuidad de las muestras de salami de fabricación nacional que arrojó niveles de nitrito de sodio superiores a los límites máximos permitidos en más de la mitad de los productos (51%), se hizo apegado a las normas científicas internacionales, con personal altamente capacitado en técnicas de análisis y ensayo de alimentos.
Indica que la coordinación del muestreo conllevó varias reuniones con el personal técnico del Departamento de Inspección y Vigilancia del organismo y con el personal técnico de la División de Evaluación de la Conformidad de la Dirección General de Normas y Sistemas de Calidad (Digenor).
Defendió la calidad del personal del Instituto de Innovación y Biotecnología Industrial (IIBI) y del Laboratorio del Control de Calidad del Veterinario Central (Lavecen) al afirmar que tienen la capacitación y entrenamiento para realizar ese tipo de prueba.
Precisó que el IIBI está certificado por la norma ISO-9001 y el Lavecen en lo que respecta al control de calidad y que actualmente es administrado por el Organismo Internacional Regional de Sanidad Agropecuaria (OIRSA) y que estuvieron supervisados por los subdirectores técnicos Rita Socorro González Cruz y José del Carmen Valenzuela Ramírez.
Según Pro Consumidor las muestras tomadas correspondieron de una a tres marcas por cada embutidora seleccionada, así como 6 muestras por cada marca, para un total de 258 muestras de unidades, correspondientes a 22 embutidoras del Distrito Nacional, Santo Domingo, Santiago, Duarte, Barahona y San Pedro de Macorís.