Murió anoche de un paro cardíaco el chofer del vicepresidente de la Suprema Corte de Justicia y expresidente de la Junta Central Electoral (JCE), Julio César Castaños Guzmán.
Frank Martínez, de 50 años de edad, murió tras sufrir un paro cardíaco cuando conducía la jeepeta Chevlolet Tahoe por la avenida Jiménez Moya y perdió el conocimiento, lo que provocó que apretara el acelerador del vehículo que perdiera el control, estrellándose contra varios árboles y un muro de la empresa Vimenca.
Castaños Guzmán viajaba en el vehículo junto a su guardaespaldas, Ramón Cordero. Ambos salieron ilesos. En el asiendo delantero del vehículo iba Cordero y atrás Castaños Guzmán, con quien trabajaba Martínez desde 2006. El accidente ocurrió a las 6:30 de la tarde. Martínez fue llevado al hospital de la Policía Nacional, en la avenida Independencia, de donde fue trasladado al Hospital General de la Plaza de la Salud, donde murió pasada las 8:00 de la noche.
A Martínez le sobreviven su esposa Jhohanny Hernández y sus tres hijos, quienes junto a otros parientes lloraban desconsolados la pérdida en la clínica, a donde también acudieron los hijos y la esposa de Castaños Guzmán y excompañeros de labores.