SANTIAGO.- La doctora Margarita Cedeño de Fernández encabezó este sábado un almuerzo de paz y solidaridad con las familias beneficiarias del programa Progresando con Solidaridad de Santiago, a quienes agradeció que formen parte de este proyecto que busca sacar de la pobreza a familias de escasos recursos.
En el encuentro, realizado en el Club de las Fuerzas Armadas de la ciudad Corazón, la Vicepresidenta compartió la mesa con los representantes de familias Progresando con Solidaridad María Elena Cruz, del Hoyo de Bartolo; Sergio Cruz, de Licey al Medio, y Eudovina María Valerio, de Cristo Rey.
Cedeño de Fernández también cortó uno de los cuatro bizcochos preparados por familias de Progresando con Solidaridad de la ciudad de Santiago, que tomaron el curso de repostería.
Las familias de Progresando con Solidaridad participaron en rifas de estufas, neveras, abanicos de pedestal, lavadoras, computadoras, entre otros electrodomésticos.
La vicepresidenta estuvo acompañada por la directora de Progresando con Solidaridad, Altagracia Suriel; el subdirector Héctor Medina, invitados especiales, y autoridades de Santiago. El reverendo padre José Agustín Fernández bendijo los alimentos.
En esta época en que la comunidad cristiana conmemora el nacimiento del niño Jesús, Cedeño de Fernández aprovecha para compartir con las familias de Progresando con Solidaridad de las diferentes regiones del país, a las que siempre pide reflexionar y dar testimonio de que la riqueza más grande está en el alma, en la capacidad de amar y en la entrega incondicional.
Este año la Vicepresidenta invitó a todas las familias dominicanas a celebrar la Navidad con espíritu de amor y solidaridad para que el niño Jesús se haga presente en cada uno de los hogares del país, y para que reine la unidad la confraternidad y la paz.
Para Cedeño de Fernández las familias que integran Progresando con Solidaridad representan la expresión de capital humano y social que está creando el gobierno que encabeza el presidente Danilo Medina, con el objetivo de impulsar el progreso personal, familiar y comunitario que necesita el país para continuar creciendo con equidad.