Santo Domingo
Dos hijos de de Manolo Tavárez Justo y varias fundaciones patrióticas presentaron una querella ante la Procuraduría General de la República por el asesinato del guerrillero, ocurrida en el 1963, en la cual piden una indemnización de 50 millones de pesos.
La querella fue presentada en contra del general retirado Ramiro Matos González, quien era secretario de las Fuerzas Armadas en ese año, y de todos los oficiales y alistados que estaban bajo el mando de éste y que se demuestre participaron en el hecho, cuyos nombres no se citan en el documento.
La querella fue entregada esta mañana al procurador Francisco Domínguez Brito por Minerva Josefina Tavárez Mirabal (Minou) y Manuel Enrique Tavárez Mirabal; representantes de Federaciones y Fundaciones Patrióticas, así como de las fundaciones Manolo Tavárez; Héroes del 30 de Mayo; Hermanas Mirabal; Héroes de Constanza, Maimón y Estero Hondo; Héroes de Luperón; Testimonio y Amaury Germán Aristy.
Los querellantes piden condenar al general retirado y a los demás implicados en el hecho al pago de los 50 millones de pesos como justa reparación de los daños morales y materiales ocasionados a los hijos del combatiente del 1963 y a las fundaciones patrióticas.
Dicen que esos recursos serán destinados a programas de formación de derechos humanos y fundamentales y finalmente dirigidos a las Fuerzas Armadas y a los cuerpos castrenses.
Solicitan que se impongan medidas de coerción a los imputados, consistente en una garantía económica de tres millones de pesos, impedimento de salida del país y arresto domiciliario.
También piden que una vez identificados los demás militares involucrados junto al general retirado, y la Procuraduría haga la fijación de audiencia preliminar, se condene a la pena de diez años de prisión por violación a los artículos 49 del Código Procesal Penal, 295 y 304 del Código Penal, los cuales sancionan los crímenes de guerra y de homicidio.
Los querellantes tienen como abogados a Luis Gómez Pérez, José Martínez Brito, Julio Escoto, Eduardo Díaz y José Horacio Rodríguez.
Consideran que la muerte de Manolo Tavárez Justo está tipificada como un crimen de guerra, por lo cual es imprescriptible.
