La Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) de Río de Janeiro, que se inaugura hoy en Río de Janeiro, ha registrado hasta ahora 355.000 inscritos, 125.000 menos que en la edición de 2011 celebrada en Madrid, informó hoy la organización.
A pesar del menor número de inscritos, los organizadores no creen que el evento sea menor, puesto que se cree que muchos brasileños van a participar sin haber cumplido con los formalismos y pagos correspondientes.
La hermana Shaiane Machado, responsable por las inscripciones, dijo hoy en una rueda de prensa que "es muy difícil comparar" las ediciones de Madrid y Río de la JMJ porque "son diferentes continentes y diferentes realidades".
"Hay que destacar lo más importante: la alegría y espontaneidad latina, que es lo que caracteriza y hace de esta Jornada única", afirmó Machado.
El menor número de participantes se explica en parte "por la cultura de Brasil", según Machado, que llevó a "muchos" fieles a acudir a la JMJ "sin cita previa".
Muchos brasileños de otras regiones sólo planean oficializar su participación en Río, mientras que otros optaron por no realizarla porque ya contaban con hospedaje, según la religiosa.
Este martes, día de la apertura oficial de la JMJ, había largas filas para recoger las mochilas que reciben todos los inscritos, que incluyen una camiseta, una gorra y varios objetos religiosos.
El coste de la inscripción variaba entre 109 y 600 reales (entre 49 y 272 dólares) por persona, dependiendo de si optaban por solicitar alojamiento o gastos de alimentación.
La organización ofreció 355.000 plazas de alojamiento para los peregrinos, 127.000 de ellas en hogares de familias voluntarias y 228.000 en colegios, iglesias y otras instituciones.
Entre los inscritos, destacan los brasileños, con 220.000 personas, seguidos de 23.000 argentinos, 10.800 estadounidenses, 9.200 chilenos, 7.706 italianos y 6.653 venezolanos.
El 56 % de los participantes son mujeres y el 75 % jóvenes de entre 14 y 25 años, mientras que sólo el 10 % supera los 45 años de edad.