Hugo Chávez habría sido trasladado, hace varios días, a su residencia presidencial de la isla de La Orchila, con el fin de pasar en un entorno familiar los últimos compases de su enfermedad.
El traslado desde el Hospital Militar se habría hecho después de que el pasado viernes los médicos evaluaran muy negativamente el resultado de una última tomografía. Esta constataba que una tumoración pulmonar, desarrollada velozmente, le afectaba ya al 35% del pulmón izquierdo, según informan a este diario fuentes en contacto con los facultativos.
Ante esa evidencia, la permanencia en el Hospital Militar, donde en cualquier caso ya solo era sometido a cuidados paliativos, se consideró innecesaria y se optó por un lugar fuera de Caracas donde la familia pueda residir junto al paciente todo el tiempo, para poder reaccionar en todo momento ante cualquier eventualidad.
En La Orchila, isla situada a 160 kilómetros de la capital venezolana, Chávez hizo instalar en 2011 instrumentación para cuidados especiales, transformando la enfermería de la residencia presidencial. Durante meses hubo en la isla un retén de miembros de su equipo médico, que le sometieron allí a algunas pruebas y tratamiento, como en su día ya informó este diario. Chávez podía esconder más fácilmente desplazamientos a La Orchila que viajes a Cuba, para los que necesitaba permiso de la Asamblea Nacional.
Chávez llegó de La Habana el 18 de febrero con sus condiciones vitales estables. Durante su tiempo en el Hospital Militar estuvo consciente, pero sus problemas respiratorios se fueron agravando, con la necesidad de volver a utilizar ventilación artificial para facilitar la respiración. Esa complicación desbarató cualquier posible intento de acto de juramentación en privado.
Examen médico
Las fuentes consultadas aseguran que en el examen médico que se le practicó en el momento de la operación del 11 de diciembre no se detectó ninguna tumoración pulmonar. Sí se observaron unas pequeñas sombras, pero no pudo determinarse nada con claridad. Posteriormente, en el líquido que se le fue extrayendo de los pulmones se encontraron células cancerígenas, si bien esto no se consideró relacionado con la grave infección pulmonar que Chávez sufrió en el postoperatorio.
El hecho de que el último examen, cuyo resultado fue valorado por la junta médica el viernes 22, mostrara que el tumor alcanzaba ya el tercio inferior del pulmón izquierdo, indica que se trata de algo que avanza con gran rapidez, de modo incluso más agresivo que la metástasis que sufre en otras partes de la zona pélvica, como la médula ósea. La nueva tumoración sería metástasis del rabdomiosarcoma pélvico diagnosticado al mandatario, aunque eso no ha sido aún ser determinado.
Las mismas fuentes advierten que el presidente venezolano tiene el sistema inmunológico extremadamente deteriorado, de manera que no sería capaz de combatir una infección con antibióticos, por eso las medidas de esterilización de todo lo que entra en contacto con él son sumamente exigentes. En los traslados del paciente ha sido necesario llevar la camilla en una burbuja de plástico.
El día de agravamiento del diagnóstico de Chávez fue precisamente la jornada en la que el vicepresidente Nicolás Maduro y otros miembros del Gobierno aseguraron haber estado cinco horas tratando con el presidente asuntos del Gobierno. El traslado a La Orchila habría ocurrido ese mismo viernes o durante el fin de semana.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, habría finalmente visitado personalmente a Chávez en La Orchila, después de que en viaje previo la semana antes a Caracas, en escala hacia Nueva York, no pudiera ver al enfermo. Se trata de una excepción que responde a la estrecha relación personal mantenida por ambos presidentes.