“¡No puedo creer que ella sea mi vecina! Es muy cool”, dijo a la publicación uno de los residentes del edificio, quien contó que ha visto a la cantante varias veces junto a su personal de seguridad.
Hasta hace un mes, Lady Gaga residía en el Lower East, en un apartamento en el que vivía incluso antes de ser famosa y por el que pagaba una modesta cantidad de 1.100 dólares, en comparación con los 22.000 dólares que abona por este ático del número 40 de South Park Central.
Pese a que aseguró en 2011 que “el dinero no significa nada para ella. Las únicas grandes cosas que ha comprado es la válvula de corazón de su papá y un Rolls-Royce para sus padres por su aniversario”, ahora parece dispuesta a cambiar su estilo de vida.
EFE